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El contador Luis Macario, del sector Industria molinera, es el nuevo presidente de la Bolsa de Cereales de Córdoba: su designación se produjo ayer durante la asamblea anual de la institución. En su primera declaración, ratificó que la Bolsa continuará trabajando conforme al Plan Estratégico que se fijo hace un par de años y, de frente a la asunción de un nuevo gobierno en la Argentina, manifestó que “ya hay un cambio de estilo, de modos: el campo lo que necesita fundamentalmente, es que lo dejen trabajar, tiene una enorme potencialidad para desarrollar”, a la cual si se la deja expresar en corto plazo se pasaría “de 100 a 150 millones de toneladas de granos”.

Macario sucede en el cargo al arquitecto Juan Martín Buteler, del sector productor, que lo ejerció en los últimos dos períodos.

El nuevo titular de la Bolsa será acompañado por Erardo Gallo como Vicepresidente; Ing. Marcos Scully como Secretario; José María Paz como Pro-Secretario; Hugo Alberto Liarte como Tesorero; y Raúl Picco como Pro-Tesorero.

Plan Estratégico de la Bolsa

Luego de su asunción, requerido sobre los ejes centrales de la gestión que inicia, Macario se declaró “convencido de la institucionalidad que deben tener organizaciones como la nuestra”, de lo cual se desprende que habrá “una continuidad de la actuación del presidente que me precede, en cuyo período se definió un Plan Estratégico, con una misión y una visión, que tiene una vigencia total: por tanto, mi gestión será una continuidad de ese trabajo”.

Entre los objetivos que ya están fijados figura “la articulación con distintos sectores de la cadena agroalimentaria, ya que hay otras organizaciones de nuestro mismo ámbito que corrientemente dilapidamos esfuerzos cuando podríamos trabajar juntos en múltiples temas y problemáticas comunes, trabajando en red, con un fin bien claro: contribuir a mejorar la sociedad en que vivimos”.

El aporte del Campo a Córdoba

Hace muy pocos días, la Bolsa presento el libro El Aporte del Campo a la Economía de Córdoba: un tercio del Producto Bruto, un tercio de todos los puestos de trabajo formales y 9 de cada 10 dólares que se exportan desde la provincia. “Esa –definió el flamante presidente- ha sido una gran tarea de la anterior gestión, para cuantificar y cualificar la trascendencia del sector agroalimentario cordobés. Ahora, en una segunda etapa, debemos salir de los ámbitos a los que estamos acostumbrados, tenemos que hacerle comprender a la población urbana la importancia del campo, que la gente tenga clara conciencia de que cotidianamente está relacionada con la producción del campo, desde la comida que se sirve cada día en su mesa hasta la vestimenta”.

“A eso –reflexionó- la sociedad urbana no lo percibe. Entonces, el desafío es salir de tranqueras adentro a mostrarle la importancia que tiene la cadena agroindustrial”.

Aparte, Macario, como los demás miembros de la conducción de la institución, opina que “el sector debe tener un protagonismo fundamental en la etapa que viene: no somos un enemigo o un sector que vive de privilegios o prebendas, sino todo lo contrario, somos un sector que produce mucho y puede producir mucho más”.