D.I.A.

Siembra. La estimación de área sembrada para los cultivos estivales arroja un incremento en la superficie de maíz de 4,2% frente a la campaña 2016/2017 posicionando la superficie en 2.359.400 has, mientras que soja (4.211.100 has) y sorgo (101.700 has) disminuirían un -1,9% y -11,8%, respectivamente. Contexto climático. Si bien continúan los reportes de estrés hídrico en toda la provincia, las precipitaciones registradas en el mes de enero, contribuyeron a incrementar en 20 a 30 puntos porcentuales las reservas de agua útil de la provincia, salvo el extremo noroeste. Soja. Sin ingresar en la etapa más crítica del cultivo, las precipitaciones registradas durante el mes de enero influyeron positivamente, mejorando el estado general del mismo, aumentando 19 puntos porcentuales la condición “Muy bueno” en detrimento de “Bueno” y “Regular”. Maíz. El 26% de la superficie de maíz se encuentra en período crítico, momento en donde se determina el número de granos, variable más importante en la definición del rendimiento. Sin cambios respecto a la segunda quincena de diciembre, el 93% del total de superficie se encuentra entre “Bueno” a “Muy bueno”. Sorgo. El 35% del cultivo se encuentra atravesando el período crítico, mientras que el 88% del estado general se concentra en “Bueno” a “Muy bueno”. Girasol. La totalidad del cultivo se encuentra en período crítico con un estado general “Bueno” a “Muy Bueno”. Maní. Sólo el 8% del maní cordobés está comenzando el período más sensible para la definición de rendimientos. El 65% del cultivo se muestra en estado general de “Muy bueno” a “Excelente”.